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Porque soy humana





No espero que nunca entristezcas, pues ni la alegría misma permanece feliz todo el tiempo.

No espero que nunca te sientas iracundo, pues ni la ira misma se controla ante toda adversidad.

No espero que siempre entiendas lo que quieres, pues ni la sabiduría misma lo entiende todo.

No espero que nunca sientas miedo, pues ni la valentía misma conoce sobre la eterna ausencia del temor.

No espero que nunca te sientas solo, pues aún la soledad se ha sentido a sí misma.




Lo que sí espero es que ni aún la tristeza te domine todo el tiempo

Que la ira no te invada constantemente.

Que la ausencia de sabiduría no sea una constante.

Que el miedo no sea tu mejor aliado.

Y que la soledad no te visite a menudo.



Eres lo que eres, siempre en constante cambio… ¡Sigue, vive, lucha!.


De corazón: tú mismo.

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